Han sido muchos los estudios que se han realizado sobre el tema de la sexualidad en los hombres y mujeres de muchos países de América Latina, tal como lo han sido aquellos en donde se confirma que en México se tiene uno de los mejores sexos del mundo, sin embargo, específicamente para los colombianos, no había datos exactos sobre sus preferencias o gustos a la hora de tener intimidad, al menos hasta ahora, gracias a un estudio del SexLab, el primer Laboratorio en América Latina de Sexualidad Humana.
El organismo, conformado por expertos en sexología y relaciones de varios países de América Latina, estudiaron los pensamientos sexuales de los colombianos, recopilando datos de más de 1.500 participantes en todo el país, incluyendo a mujeres, hombres, personas trans y personas no binarias de diez ciudades de Colombia.
En este estudio, se dio a conocer que casi todas las personas han experimentado fantasías sexuales en algún momento de sus vidas, ya sea durante las relaciones sexuales, la masturbación o en su día a día.
De acuerdo a Mayra Gómez-Lugo, directora del SexLab,“aunque se ha pensado que las fantasías son siempre agradables, algunos estudios recientes han demostrado que no siempre lo son del todo para las personas. De hecho, existen dos tipos de pensamientos sexuales: los positivos, que son placenteros y agradables; y los negativos, que generan incomodidad o rechazo”.
Dichos resultados arrojaron que una de las fantasías más llamativas es que el tipo de sexo que más prefieren los colombianos es el denominado 'vainilla': se refiere a fantasías sobre relaciones sexuales convencionales y románticas, "sin elementos extremos o inusuales, como tener intimidad con una pareja amada" explica Gómez-Lugo, convirtiéndose en la fantasía sexual convencional para la mayoría de los participantes, con un 51 % de los hombres y un 55 % de las mujeres que la reportaron como su favorita.
Si bien el nombre de esta práctica se adopta de lo romántico o 'dulce' que pueda ser un encuentro sexual con una pareja estable por la que se siente afinidad, los colombianos también fantasean con tener sexo en lugares prohibidos o peligrosos, como un avión, el trabajo o un parqueadero. En ese sentido, un 47 % de los hombres y un 46,8 % de las mujeres reportan este tipo de fantasía como su favorita.
Respecto a las relaciones abiertas, los hombres colombianos demostraron una mayor tendencia hacia las fantasías relacionadas con tríos (con un 44.72 %), mientras que las mujeres prefieren imaginar encuentros en lugares exóticos o extravagantes, como en un pent-house, yates o playas privadas (en un 41 %) donde puedan dar rienda suelta a sus fantasías.
A pesar de que los resultados de dicho estudio han arrojado resultados diferentes entre hombres y mujeres sobre lo que disfrutan de una fantasía sexual, es revelador el ver que ambos están de acuerdo en que besar apasionadamente sea una práctica recurrente, al respecto el 99,5 % de los encuestados mencionaron haber tenido este pensamiento al menos una vez en su vida, lo que refleja un fuerte deseo de cercanía y afecto en los momentos de intimidad.
Foto de Toa Heftiba en Unsplash
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