La primera vez que escuché el nombre de Loro Piana fue hace unos siete años. Tengo contacto con la moda de muchas formas y por otras facetas de mi trabajo habitúo a ir a sastrerías y fue en una de ellas donde descubrí la firma italiana. Vi un muestrario de lanas y me hablaron de los precios y los porqués detrás de estos, las diferencias entre unos y otros y el bagaje de la marca en sí.
No obstante, hasta hace mucho menos el nombre de Loro Piana no ha comenzado a retumbar de forma más popular en la sociedad y lo ha hecho de la mano de la tendencia del lujo silencioso, algo que ni siquiera sé si se podría llamar así, ya que siempre ha estado presente para según qué públicos y al hacerse extensible al resto del mundo pierde ese concepto, sobre todo porque muchas veces lo que se hace es una adaptación del mismo mediante la compra de prendas y accesorios de firmas mucho más accesibles.
Junto a Loro Piana, otras firmas como Brunello Cucinelli, The Row, Tom Ford, Ralph Lauren o Zegna, una marca que también conocí por aquel entonces, se han posicionado en ese estándar que ofrece una calidad altísima, ya que todo está confeccionado y/o fabricado con las mejores materias primas posibles, mano de obra y procesos, a unos precios extremadamente alto y unos diseños apenas identificables en el sentido de que es muy, muy raro encontrar un logo en ellos que los asocie a su origen. ¿Quiénes saben lo que verdaderamente hay detrás? Pues aquellos que se dedican a la moda o el resto de gente que consume de la misma forma esta.
El personaje de Kendall Roy en Succession con un jersey de cashmere
En la cultura pop es muy habitual encontrar diálogos en series y películas que aludan al término “nuevo rico”. Por ejemplo, sucede en Titanic, cuando la madre del personaje de Rose DeWitt Bukater habla sobre la amable y realista Margaret Brown, interpretada por Kathy Bates. Si nos trasladamos a la actualidad, un caso claro de lujo silencioso en escenarios ficticios, serían el del vestuario que se puede apreciar en Succession, la ficción que en parte se ha encargado de poner en el mapa de forma abierta a Loro Piana mediante Kendall Roy (Jeremy Strong).
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Loro Piana: la definición de una marca de hiperlujo
El background de la firma
Loro Piana nació como una empresa familiar. De hecho, en sus inicios se dedicaban a comerciar con lana en el siglo XIX, tal y como indican en Vogue Arabia. El uso de estos tejidos sigue presente en el ADN de la marca.
Aunque todo comenzó en Trivero, más tarde se trasladaron a Valsesia, donde Pietro Loro Piana fundó lo que hoy conocemos como tal en 1924. Sí, una época muy convulsa: con el crack del 29 a la vuelta, los estragos aún de la I Guerra Mundial asolando el mundo y creando uno nuevo y los totalitarismos mirando de reojo, acechando, como siempre.
Tras el fin de la II Guerra Mundial, el sobrino de Pietro, Franco Loro Piana, se granjeó una reputación gracias a sus lanas y a sus cortinas de moda de una calidad excelente.
En los años 70, Pier Luigi y Sergio Loro Piana accedieron a la dirección de la empresa y en su presencia la marca vivió momentos tan importantes como la búsqueda de textiles de la calidad más alta posible, como el cashmere. Además, juntos concibieron el tejido Tasmaniano. En sastrería es muy habitual distinguir entre lana inglesa y lana australiana.
Pier Luigi y Sergio Loro Piana | Launchmetrics Spotlight
En la década de los 80, los directores decidieron comenzar a diversificar el negocio, algo fundamental para la supervivencia de una empresa, lanzando su primera colección Ready To Wear y creando la división de productos de lujo. En 2006 hicieron lo propio con una línea de decoración de interiores.
En 2013 el grupo francés LVMH, el mismo que representa una mayor parte de las exportaciones del país galo que el sector agrícola, se hizo con el 80% de la compañía y en 2017 adquirió un 5% más. Lo de la globalización con pérdida de identidad por el camino que acontece tantas veces. Qué dolor, pero qué mundo.
Desde noviembre de 2021, Daniel Bertrand es el CEO de Loro Piana.
La exclusividad del cashmere
Aunque la razón de los precios de las prendas y complementos de Loro Piana se debe mucho a su actual posicionamiento en el mercado, también es cierto que los materiales que emplean para hacer los mismos son realmente difíciles de obtener.
Como decía antes, entre ellos se encuentra el cashmere, que se obtiene de un tipo de cabra concreto, la Hircus, que reside en climas extremos. Cada animal produce entre 200 y 250 gramos de lana al año y en primavera mudan su pelaje de forma natural, momento en el que los pastores lo recolectan peinándolas con delicadeza.
Sin embargo, también hay que hablar del baby cashmere, procedente de los cabritos, más exclusivo aún ya que solo se puede obtener durante el primer año de vida de estos.
Cabras, vicuñas y algún que otro escándalo
No obstante, no solo de pan vive el hombre ni solo de cabras lo hace Loro Piana. La vicuña es un mamífero que pertenece al género de las lamas, al cual también pertenecen las llamas, claro, que habita en ciertas zonas altas de Sudamérica. En concreto lo hace en el noroeste de Argentina, el oeste de Bolivia y el noreste de Chile.
Vera & Jean-Christophe vía Wikipedia
La fibra procedente de este animal es una de más raras del mundo y durante años. De hecho, fue cazada de forma indiscriminada durante más de cuatro siglos, como especifican en Vogue Arabia, por lo que la vicuña estuvo a punto de extinguirse.
¿Qué sucedió en 1994? Pues que Loro Piana firmó un acuerdo con el gobierno de Perú y las comunidades andinas para poder comprar, procesar y exportar fibra de vicuña de manera exclusiva pero siempre obtenida de animales vivos. De hecho, las dos partes renovaron el acuerdo en 2008 y crearon la Reserva Dr. Franco Loro Piana, una zona protegida donde las vicuñas campan en libertad.
En cuanto a la obtención de esta lana tan especial en Argentina y Bolivia, se hace con métodos sostenibles y con la participación de la comunidad local.
Polo Hai de Loro Piana por 1100 euros
Abrigo Gerry de vicuña y baby cashmere de Loro Piana por 22.000 euros
Mocasines de piel de buey, con la clásica suela blanca de Loro Piana, por 870 euros.
Sudadera tipo bomber de Loro Piana disponible por 7950 euros.
Sostenibles y solidarios, pero no mucho
Sin embargo, como de costumbre no es oro todo lo que reluce, aunque en estos casos lo es casi siempre de una forma u otra, al menos para los mismos.
Hace apenas un mes, Bloomberg lanzó en Youtube un pequeño documental en el que denunciaba los altísimos precios de las prendas y complementos de Loro Piana a la vez que hacía lo mismo con las condiciones salariales de aquellos que trabajan la lana de vicuña en primera instancia en el terreno de origen. Ahora lo de la Reserva Dr. Franco Loro Piana suena un poquitín menos idílico. Así, por lo que sea, es más fácil hacer una fortuna, aunque lo de vender abrigos a más de 30.000 euros ya te lo asegura un poco.
Fotos | Launchmetrics Spotlight et al., Warner Bros. Vera & Jean-Christophe vía Wikipedia, Loro Piana et al.
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