En el mundo de la moda, "todo lo que no se recuerda está condenado a repetirse", y las fuentes de inspiración pueden surgir de los lugares más inesperados, sin embargo, el plagio también se puede dar en cualquier lugar, y un ejemplo notable de ello es el proyecto fotográfico de Yurko Dyachishyn, un fotógrafo ucraniano que documentó en imágenes a quien muchos consideran fue el indigente mejor vestido del mundo.
"Slavik's Fashion", el nombre de este proyecto, es un conjunto de imágenes del estilo único de Slavik, un hombre sin hogar de Leópolis, Ucrania. Lo más destacado de esta iniciativa es que ha capturado la atención de la industria y ha resonado en las creaciones de diseñadores de renombre como Demna Gvasalia, director creativo de Balenciaga.
Durante dos años, Dyachyshyn fotografió a Slavik en más de 100 conjuntos diferentes, cada uno cuidadosamente coordinado y único. A pesar de su situación, Slavik demostraba una creatividad y sentido de la moda impresionantes, convirtiéndose en una figura emblemática en las calles de Leópolis.
Demna Gvasalia, originario de Georgia y actual director creativo de Balenciaga, es conocido por incorporar elementos de la moda urbana y la cultura contemporánea en sus diseños.
Su enfoque disruptivo y su capacidad para reflejar las sensibilidades sociales actuales han redefinido la moda de lujo, sin embargo, muchos creen que, en realidad se apropió de la estética de Slavik, ya que en pasarela se han visto varios estilismos básicamente idénticos a los que Yurko ha fotografiado para su proyecto.
Pero para Balenciaga no ha sido la única polémica al vincularse con la estética homeless: anteriormente, al presentar un modelo de zapatilla desgastado y sucio simulando un uso extremo, muchas personas lo interpretaron como una romantización de la indigencia.
Además, en uno de sus desfiles, el escenario mostraba un espacio abierto cubierto de nieve y lodo, donde los modelos se enfrentaban a una invernal ventisca que dificultaba su andar, una puesta en escena muy criticada ya que, en medio de la recién detonada invasión de Rusia a Ucrania, se entendió como una glamourización frívola del desplazamiento de civiles debido a la guerra.
Slavik, actualmente de paradero desconocido, fue un gran icono de la moda y una fuente de inspiración para Demna en Balenciaga y en su paso por la firma que tiene con su hermano, Vetements, donde el uso de elementos asociados a la pobreza y la indigencia por parte de estas marcas de lujo plantean interrogantes sobre los límites éticos en la moda.
Fotos de slaviksfashion
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