El duro momento que vivimos pide que nos quedemos en casa y eso, además de afectarnos en lo personal, obliga a todos los sectores a darle una vuelta a su metodología de trabajo. No sólo empresas y colegios se han reconvertido, las sesiones fotográficas de moda también lo han hecho. Los photoshoots en remoto permiten a los fotógrafos seguir disparando, aunque sea virtualmente y mediante FaceTime.
Cindy Crawford fue la primera que nos advirtió hace cinco días de esta nueva modalidad de sesiones de fotos. La top model posó para la fotógrafa Kat Irlin desde su casa y compartió los resultados en su cuenta de Instagram. La sesión, realizada a más de 4.000 km de distancia (Irlin vive en Nueva York y Cindy en California), dejaba constancia de las bondades de este tipo de fotografía y constituyó una prueba ferviente de que se trata de una opción valida. "La moda y la fotografía van a ser diferentes por un tiempo, pero eso no significa que debamos dejar de ser creativos" confesaba la modelo.
Las videollamadas permiten seguir haciendo sesiones fotográficas durante la cuarentena. Lo único que se necesita es un móvil con una aplicación de llamada por vídeo, buena iluminación y muchas ganas. Y es que las nuevas tecnologías unidas a la creatividad pueden dar como resultado verdaderas maravillas. Fotos con ese efecto granulado tan de moda de estética lo-fi como las de Cindy.
Según Tim Dunk, un fotógrafo inglés que anuncia que realiza este fotografía remota en su web, para que la calidad sea buena, es necesario que la persona que vaya a fotografiar utilice un iPhone con al menos i0S 11. Él, por su parte, utiliza un MacBook Pro y realiza las fotos haciendo capturas de pantalla de vídeos cortos de 3 segundos que hacen los modelos mediante FaceTime Live Photos y le envían.
La distancia no es una barrera, y si no que se lo digan al fotógrafo Alessio Albi, quién lleva realizando este tipo de producciones desde que comenzó la cuarentena. El fotógrafo tiene montones de buenos resultados en su cuenta de Instagram y ha sido toda una inspiración para el resto de profesionales. Tanto fotógrafos, como estilistas y modelos.
Esta práctica de fotografía a distancia ha llegado tan lejos, que hasta la propia Bella Hadid la ha probado. La modelo, realizó un reportaje fotográfico hace una semana y narraba lo siguiente: "los tiempos cambian, y trabajar desde casa adquiere un nuevo significado… Nuevo trabajo para Vogue Italia, con fotos y estilismo realizados a través de FaceTime por mis reinas de la cuarentena. Me siento muy afortunada de trabajar".
En nuestro país también podemos encontrar profesionales que han incorporado esta técnica a su trabajo. El fotógrafo Cristian Pena ha fotografiado a modelos como Mayka Merino y Alba Galocha.
Lejos de los estudios fotográficos, la fotografía de moda se ha transformado con la cuarentena sabiéndose adaptar y buscando soluciones que ayuden a sacar adelante su trabajo. Y la fotografía remota no es la única variante nueva.
En nuestro país, podemos encontrar otro ejemplo de cambio en el grupo Inditex, quién mediante sus firmas Zara, Stradivarius, Bershka, Pull&Bear y Oysho, ha presentado sus novedades con fotos hechas durante estos días en las casas de las modelos por otras modelos, parejas o amigos con conocimientos de fotografía que viven con ellas.
Además, Desigual ha sacado una campaña llamada "Divinos en casa" en la que los empleados se convierten en modelos y Zalando ha lanzado una campaña producida en remoto que muestra escenas diarias de deporte ("Together I am strong").
Un último ejemplo de actualización lo podríamos encontrar en la campaña primavera-verano 2020 de Bimba y Lola "Yo quiero bailar". Para su realización, la modelo y cineasta Diane Guais se puso delante y detrás de la cámara a la vez, elaborando ella sola todo el photoshoot.
Fotos | Bimba y Lola, Zalando, Bershka, @pena_cristian, @belleahadid, @alessioalbi