No hace falta ser un niño para disfrutar de la magia que encierran los libros de la saga Harry Potter. Quienes nos hemos sumergido en sus páginas como adultos los hemos disfrutado tanto o más que quienes los disfrutaron en la infancia. Porque las historias de Harry, Hermione, Ron, Dumbledore y compañía contienen grandes enseñanzas para la vida, que conocemos a través de las palabras de nuestros personajes favoritos. Y todas las podemos aplicar a nuestro día a día. ¿Lo comprobamos?
Para aprender a distinguir a la buena gente
«Si quieres saber cómo es un hombre, echa un vistazo al modo en que trata a sus inferiores, no a sus iguales».
Sirius Black, en Harry Potter y el cáliz de fuego.
Para esos momentos en que el pesimismo nos invade
«La felicidad se puede encontrar hasta en los más oscuros momentos, si somos capaces de usar bien la luz».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y el prisionero de Azkaban.
Para recordar la magia que hay en una buena conversación
«Las palabras son, en mi no tan humilde opinión, nuestra más inagotable fuente de magia, capaces de infringir daño y de remediarlo».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y la piedra filosofal.
Para asumir que no todo en la vida es de color de rosa
«En todo momento esplendoroso de felicidad hay una gota de veneno: la certeza de que el dolor volverá».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y el legado maldito.
Para no olvidarnos nunca de soñar
«Claro que esto sucede en tu cabeza, Harry, pero ¿por qué eso tiene que significar que no es real?».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y las reliquias de la muerte.
Para ayudarnos a reunir valor para aclarar desacuerdos con alguien a quien queremos
«Hay que tener un gran coraje para enfrentarse a nuestros enemigos, pero se necesita aún más valor para enfrentarnos a nuestros amigos».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y la piedra filosofal.
Para que estos tiempos de redes sociales no nos confundan
«La fuerza de tus convicciones determina tu éxito, no el número de tus seguidores».
Remus Lupin, en Harry Potter y las reliquias de la muerte.
Para aprender a valorar la amistad
«En eso consiste la amistad. Tú no sabes lo que necesita tu amigo, solo sabes que necesita algo».
Albus Potter, en Harry Potter y el legado maldito.
Para no perder de vista la importancia de las emociones
«Se puede vivir sin alma, mientras sigan funcionando el cerebro y el corazón. Pero no se puede tener conciencia de uno mismo, ni memoria, ni nada. No hay ninguna posibilidad de recuperarse. Uno se limita a existir, como una concha vacía».
Remus Lupin, en Harry Potter y el prisionero de Azkaban.
Para aferrarnos a nuestros ideales en tiempos difíciles
«Tiempos oscuros y difíciles nos aguardan. Pronto deberemos elegir entre lo que es correcto y lo que es fácil».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y el cáliz de fuego.
Para no perder nunca la confianza en nosotros mismos
«Trabajar duro es importante, pero hay algo que importa más: creer en ti mismo».
Harry Potter, en Harry Potter y la orden del fénix.
Para tener siempre presentes a quienes nos faltan
«¿Piensas que los muertos a los que hemos querido nos abandonan del todo? ¿No crees que los recordamos especialmente en los mayores apuros? Tu padre vive en ti, Harry, y se manifiesta más claramente cuando lo necesitas».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y el prisionero de Azkaban.
Para no olvidar que hay cosas más importantes que la apariencia
«¡Perdona! Pero no me gusta la gente solo porque sea atractiva».
Hermione Granger, en Harry Potter y el cáliz de fuego.
Para que nunca pase de moda que la unión hace la fuerza
«Seremos más fuertes cuanto más unidos estemos, y más débiles cuanto más divididos. El don de esparcir discordia y enemistad es muy grande... podemos combatirlo demostrando un lazo de amistad y confianza igualmente fuertes».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y el cáliz de fuego.
Para no dejarnos vencer por la envidia
«La gente encuentra más fácil perdonar a los demás por equivocarse que por acertar».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y el misterio del príncipe.
Para aprender a ser sensibles con las verdades que duelen
«La verdad es una cosa bellísima y terrible y, por lo tanto, debe ser tratada con gran cuidado».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y la piedra filosofal.
Para recordar que la actitud es más importante que la aptitud
«Son nuestras elecciones, Harry, las que muestran quienes somos realmente, mucho más que nuestras habilidades».
Albus Dumbledore, en Harry Potter y la cámara secreta.
Porque hay algunas cosas que duran para siempre (como el amor por Harry Potter)
«¿Después de todo este tiempo? Siempre».
Severus Snape, en Harry Potter y las reliquias de la muerte.
Imágenes | Harry Potter, Giphy.
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