Bajo la imponente sombra de la vasta tradición vinícola de la Ribera del Duero, Bodegas Portia presenta su más reciente referencia: el Portia Gala Reserva. En este lanzamiento, la bodega ha alcanzado un nuevo pináculo, reafirmando su compromiso con vinos auténticos y de mucha calidad.
Con una meticulosa atención al detalle desde la viña, el Portia Gala es un buen ejemplo de la habilidad artesanal y la dedicación de los profesionales detrás de este proyecto. Con las uvas Tempranillo, cultivadas en suelos arcilloso-calcáreos, seleccionadas a mano de parcelas especialmente escogidas, se establecen unos poderosos cimientos para este gran vino.
Nota de cata de Gala, de Bodegas Portia
Este tinto se presenta con un color rojo rubí profundo, preludio de la riqueza aromática que se despliega en la nariz. Aromas intensos de frutas negras maduras, como cereza negra y mora, se entrelazan con notas balsámicas de hierbas aromáticas, creando una sinfonía olfativa que invita a la exploración sensorial.
En boca, el Portia Gala revela una armoniosa fusión entre las frutas negras y las influencias de la madera de roble, resultado de sus 17 meses de crianza en barricas nuevas de roble francés. Con un cuerpo medio, este vino seduce con taninos sedosos que acarician el paladar, culminando en un final largo y elegante, impregnado de especias y un sutil toque de chocolate negro.
El Portia Gala es más que un simple vino; es un tributo al legado vinícola de la región. Su versatilidad lo convierte en un compañero ideal para una amplia gama de platos, desde carnes rojas hasta arroces típicos de la región, e incluso platos de pasta con salsas de tomate.
