Practicar deporte en verano cuando las temperaturas son muy altas puede suponer un reto demasiado arriesgado para muchos, pero si disponemos de una piscina tenemos la oportunidad de seguir con nuestra rutina sin pasar ni una pizca de calor. Estos ejercicios se realizan sin material y según apuntan los expertos de Vitónica reúnen "trabajo de resistencia donde buscamos elevar la frecuencia cardiaca y trabajo de fuerza con el que buscamos un reto muscular". Decimos adiós a las excusas para no seguir con una vida activa en verano.
Antes de enumerar los ejercicios concretos, recordamos que nadar es un deporte muy completo. Si disponemos de una pequeña piscina, podemos emplear un cinturón de natación y ejecutar natación estática. Si tenemos una piscina grande, no hay mayor problema.
Ejercicios de resistencia y acondicionamiento en la piscina
Jumping jack adaptados
En Vitónica se detienen primero en los jumping jack adaptados. Los expertos apuntan que para adaptarlo tanto manos como piernas tienen que permanecer dentro del agua, "luchando así contra la resistencia que este elemento nos ofrece".
Batido de piernas agarrados al borde de la piscina
Este ejercicio se realiza aguantándonos al extremo de la piscina y bateando con los pies como si nadáramos a crol. Así, "trabajaremos la resistencia cardiovascular a la vez que mejoramos la técnica de natación. Puedes alternar un tiempo de trabajo más lento y centrándote en la técnica seguido de momentos de intensidad pico en los que las patadas sean a máxima intensidad".
Skipping en el sitio o en movimiento
El skipping o rodillas al pecho es un movimiento fácil de ejecutar dentro del agua. Con él trabajamos principalmente la resistencia y técnica de carrera "Debido a la resistencia del agua nos costará más realizarlo en algunos puntos que si lo hacemos fuera de la piscina", apuntan los profesionales.
Ejercicios de fuerza en piscina
Sentadillas con salto
El movimiento es igual dentro y fuera de la piscina, una clásica sentadilla con salto final. "Debemos tener en consideración que en función de la profundidad de la piscina habrá más o menos impacto y el peso a mover será mayor o menor. Es aconsejable realizar las sentadillas con salto en diferentes zonas de la piscina, dejando siempre la cabeza fuerza del agua", agregan.
Zancadas con salto
Otro clásico del gimnasio, las zancadas con salto. "Puedes hacerlas alternando piernas o primero con una hasta completar todas las repeticiones de la serie y después con la contraria de igual manera" comentan los profesionales.
Subir a la escalera a una pierna
Las escaleras de la piscina también nos pueden dar mucho juego. "Este ejercicio simula la subida a un step o a un cajón, ejercicio que estimula prácticamente la totalidad de la pierna". El movimiento es fácil: nos colocamos de frente a una de las escalerillas de salida y hacemos el gesto de subir un escalón con una pierna. La pierna que está en el fondo de la piscina no se apoya en la escalera, simplemente acompaña el gesto.
Fondos de pecho y tríceps en piscina
Finalmente, un trabajo para el tronco superior. En Vitónica apuntan que "este ejercicio puede ser dificultoso si no cuentas con una base de fuerza. En ese caso es mejor realizar unas flexiones de brazos en la parte menos profunda de la piscina apoyando nuestros brazos en el borde de la misma y realizando así unas flexiones con inclinación. Cuanto más cuerpo tengamos fuera del agua, más intenso será el ejercicio.
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