Nueve formas de usar el aceite de coco en la piel, el pelo y la cocina, según una editora de Trendencias

Si tienes aceite de coco en casa tienes un tesoro en muchos ámbitos de tu día a día. Especialmente en tu rutina de autocuidados, porque este ingrediente lleva la hidratación a otro nivel. ¿No sabes cómo incluirlo? Hoy te cuento todos los usos que yo le doy para sacar el máximo partido a sus activos y aprovechar su delicioso aroma tropical.

Como hidratante corporal

El aceite de coco es rico en ácidos grasos que respetan y restauran el pH de la piel. Por eso es la alternativa natural perfecta a las cremas hidratantes, que se absorbe rápidamente y alcanza todas las capas dérmicas. Si por sí mismo te resulta demasiado untuoso siempre puedes hacer como yo en verano y aplicar unas gotas de aceite de coco a tu crema corporal de cabecera. Incluso se puede añadir en la bañera para crear una experiencia aromática y muy suave con la piel. Hace maravillas en las zonas más complicadas, como codos o talones.

El tratamiento facial semanal

Aunque en el cuerpo lo uso a diario, me resulta demasiado graso y untuoso para el rostro. Por eso prefiero apostar por usarlo como mascarilla hidratante una vez a la semana, aprovechando las propiedades anti-inflamatorias y antibacterianas que tiene el aceite de coco para reducir y controlar mi rosácea. Un truco que me dio una dermatóloga hace más de 10 años y que me sigue funcionando. Para ello aplico aceite de coco crudo en mejillas, nariz y frente y lo dejo hacer efecto durante 10 minutos antes de limpiar el producto sobrante.

Como desmaquillante sin químicos

Si tienes la piel sensible y se irrita con mirarla, no hay mejor desmaquillante natural. Arrastra y elimina todo el maquillaje pero a la vez hidrata y protege la piel, por lo que al terminar la limpieza facial no siento tirantez ni sequedad en el rostro. Basta con aplicar un poco en un disco desmaquillante.

Para el cabello seco y castigado

Éste es, sin duda alguna, mi uso favorito y más repetido: el aceite de coco para el pelo (junto al hidratante corporal). Nada hidrata el pelo como unas gotas de aceite de coco bien repartidas en el cabello seco para dar brillo y suavidad. También lo uso como mascarilla prelavado. Para ello empapó la melena en aceite, la recojo con un moño para no manchar y dejo que actúe una hora. Una rutina que me inspiró la mismísima Gigi Hadid. Y si después quedan las raíces algo grasas recomiendo hacer una exfoliación capilar.

Para aliviar eczemas y sarpullidos

- Aceite de coco crudo y prensado de Sister&Co, 19,95 euros.

Como decía antes, las propiedades anti-inflamatorias y antibacterianas del aceite de coco lo convierten en un producto ideal para las mascarillas faciales. Especialmente si sufres de piel reactiva como yo. En ese caso es ideal también para usar en eczemas o alergias cutáneas porque alivia el picor, la inflamación y la rojez.

El producto ideal para las cutículas secas

Todas las áreas conflictivas de nuestra piel se pueden beneficiar de la hidratación que da el aceite de coco. Codos y talones, pero también las cutículas que tienden a agrietarse y son propicias a la aparición de pellejos incómodos. De hecho, en muchos centros de manicura usan aceite de coco para hidratarlas y mimarlas cuando las acaban de cortar.

Como protector capilar en días de playa

Algunos estudios confirman que el aceite de coco es un fotoprotector bajo y bloquea un 20% de los rayos ultravioleta. Esto no es suficiente para proteger nuestra piel. Pero yo noto muchísimo también sus efectos negativos en la melena, que tiende a ponerse cobriza, secarse y abrir las puntas. Por eso, ese mismo moño que uso como mascarilla capilar lo hago también en la playa, para cuidarlo del sol.

Como sustituto del cacao para los labios cortados

Además de codos, cutículas y talones, el aceite de coco es ideal para los labios cortados. Yo en este caso apuesto por los prensados en frío porque son sólidos en temperatura ambiente, aunque al contacto con los dedos enseguida se derriten. Por eso son los más cómodos de usar como bálsamo labial.

Y además de todo...¡se come!

El consumo de aceite de coco estuvo cargado de polémica hace tres años debido a su altísimo contenido en ácidos grasos saturados. Sin embargo, en su justa medida es un alimento que tiene muchas ventajas: ayuda al corazón, a la pérdida de peso en dietas y es un buen refuerzo del organismo. Yo lo uso para hacer tortitas, porque da un sabor dulce ideal para los postres. Pero también en el aliño de las ensaladas más exóticas y aromáticas.

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Fotos | Sister&Co, @anisasojka, Unplash, Pexels.