Nicole Kidman, al más puro estilo Reina de la Nieves, ha vuelto a pasear sus fabulosos 49 años por la sofisticada alfombra roja de los Globos de Oro 2017. Ella no ha defraudado con su atrevida elección, eso sí, no sabemos si la actriz podía caminar muy bien con su ajustado diseño.
La actriz ha vuelto a elegir a uno de sus favoritos: Alexander McQueen. Un vestido semi-transparente plateado de tirantes, mangas caídas transparentes y cola de tul blanca, terminadas en unos delicados puños plateados. Un modelo de la colección Primavera-Verano 2017. Lo ha combinado con una gargantilla doble muy sencilla y sandalias de Stuart Weitzman. ¿Un fallo? La especie de corsé blanco que se puede apreciar bajo el tejido transparente.
Fotos | Gtres
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